Por Miguel Ángel Martín, Columnista de Sixers.com
Por fin hemos vivido el momento que tanto estábamos esperando. Los Sixers han vuelto a las canchas de la NBA, comenzando la pretemporada que otros equipos habían comenzado el pasado fin de semana.
Lo cierto es que el resultado a estas alturas de campeonato es pura anécdota, pero los Memphis Grizzlies han logrado imponerse a los 76ers en este primer envite, por 110-89, en un partido en el que hasta el descanso todo iba igualado en el marcador, pero tras la reanudación, Memphis se mostró más sólido que Philadelphia y obtuvo una renta de 13 puntos de ventaja, solo en el tercer periodo (parcial de 30-17), que dejó encarrillado el triunfo visitante, en esta primera toma de contacto.
Quizás todas la miradas estaban puestas en lo que harían en su debut Markelle Fultz y Ben Simmons, pero lo cierto es que los focos terminaron estando en Robert Covington y Jahlil Okafor.
Por parte de los rookies, cabe destacar que Ben Simmons fue el líder de los Sixers en asistencias. Centró su actuación, más bien en repartir juego, que en anotar él mismo. En los 25 minutos que estuvo en pista, terminó con un promedio de acierto en tiros de campo de 2/8, para un total de 6 puntos anotados, capturando además 7 rebotes y un total de 9 asistencias repartidas para sus compañeros.
Si hubiese mejorado un poco su tiro, habría estado muy cerca de alcanzar su primer doble-doble con los Sixers, pero como he mencionado antes, las estadísticas que su puedan sacar en estos partidos, son más bien anecdóticas.
El otro novato sobre el que estaban centrados lo focos era Markelle Fultz. El número uno del pasado draft no estuvo acertado en los tiros de campo, en los casi 23 minutos que estuvo en cancha, con un total de 2/13 en promedio de acierto (0/3 en triples), logrando asistencias y los mencionados 4 puntos en su cuenta particular.
Los verdaderos protagonistas del partido, terminaron siendo Robert Covington y Jahlil Okafor. En el caso de Covington, el alero de los Sixers terminó el partido con 13 puntos anotados, con un promedio de acierto de 4/11 en tiros de campo (4/10 en triples), logrando además 5 rebotes para nuestro equipo.
Cabe destacar que casi toda su aportación ofensiva llegó desde más allá de la línea de tres puntos, dejando las penetraciones a canasta para otro momento, definiendo de este modo su aportación a Philaldephia en los casi 22 minutos que estuvo en pista.
Sin embargo el auténtico líder del equipo en la noche inaugural de la pretemporada se llama Jahlil Okafor. Empató con Covington como el máximo anotador del equipo (13 puntos), pero teniendo un promedio de acierto muy distinto al del resto de compañeros mencionados hasta ahora.
Terminó el partido con un 5 de 6 en tiros de campo, además de capturar rebotes, todo ello en apenas 18 minutos de juego, demostrando que ha vuelto para dar lo mejor de sí mismo y aportar grandes cosas a los Sixers, en la temporada que está a punto de comenzar (sobre todo ahora que Embiid está terminando de recuperarse de la lesión que sufrió el pasado mes de enero).
Otros jugadores que destacaron en el partido fueron J.J. Redick, que jugó 22 minutos y que tras lograr un promedio de acierto en tiros de campo de 4/7, terminó con 11 puntos. Cerca de los dobles dígitos en anotación se quedaron Richaun Holmes (9 puntos con un 4/8 en tiros de campo) y Nik Stauskas (9 puntos, con un 1/4 en tiros de campo, pero con un 7/7 en tiros libres).
Este fue el transcurrir del primer partido de Philadelphia en esta pretemporada. Todavía queda mucho camino que recorrer, hasta lograr los objetivos marcados para el 2018, pero los primeros pasos ya se están dando.
Los Celtics serán el próximo rival de los Sixers, el próximo viernes y de nuevo en el Wells Fargo Center como escenario de este nuevo partido de pretemporada.
Hasta pronto desde España.