Por Miguel Ángel Martín
Columnista de Timberwolves.com
SIXERS 95 - TIMBERWOLVES 100
(26-19 / 26-27 / 21-28 / 22-26)
Los Lobos lograron ante Philadelphia su primer triunfo en casa de la temporada y sexto de la temporada, en un partido muy especial para ambos equipos, por diversas razones.
La primera era comprobar cuál de las dos rachas negativas se rompiera primero, si la de Minnesota que no vencía en casa en lo que llevábamos de temporada (0-6 en los partidos disputados en Minnesota) o si sería Philadelphia el que rompería su racha negativa de no haber conocido el triunfo todavía (llegaba al Target Center con un balance de 0-14).
El segundo gran atractivo era ver a dos de las tres primeras elecciones del pasado draft. Karl-Anthony Towns y Jahlil Okafor, números uno y tres respectivamente, habían demostrado su tremenda calidad en los primeros compases de la temporada y este duelo sería como asomarse al futuro por una ventana.
Sin embargo fue Andrew Wiggins quien fue el máximo protagonista del partido, siendo el hombre decisivo para decantar la victoria del lado de los Lobos, sobre todo gracias a los últimos minutos del encuentro en los que tomó las riendas del equipo, anotando 11 puntos en cinco minutos, para evitar otra dolorosa derrota en casa.
Y es que la racha de derrotas en el Target Center ya se hacía demasiado larga. No tan tortuosa como la racha de los Sixers que no conocen la victoria en los primeros 15 partidos de la temporada, pero en esta ocasión los Lobos no podían fallar.
La temporada pasada, los Sixers acudían al Target Center de Minneapolis con una situación similar. Llegaban también sin conocer la victoria y con el peso de entrar en los libros de historia como el equipo con peor comienzo de temporada de la historia, pero una victoria les llevó a evitar un balance de 0-17.
Aquella fue una derrota amarga para los Lobos y en esta ocasión no se quería volver a fallar, sobre todo porque con esta victoria, el equipo se podría con un balance de 6-8, como el noveno equipo del Oeste y a tan solo medio triunfo del octavo clasificado (que ahora es Utah) y manteniendo el buen clima de este comienzo de temporada.
Wiggins se encargó de hacer realidad los mejores pronósticos para los Lobos, a pesar de que los Sixers dominaron el marcador por 13 puntos en algunos momentos de la primera parte y tenían 5 puntos de ventaja a falta dos minutos y medio para el final del partido.
Los 25 puntos y 12 rebotes de Okafor no pudieron con los 32 puntos (10-21 en tiros de campo y 11-12 en tiros libres), 6 rebotes y 3 asistencias de la joven estrella canadiense de los Lobos, que demostró una vez su condición de futuro MVP de la competición, por estadísticas y por presencia en los momentos decisivos de los partidos, dando en esta ocasión un importante triunfo a los suyos.
Quien no pudo dar la réplica oportuna a Okafor, fue Towns que estuvo limitado por las faltas y no pudo estar más que 19 minutos en pista, para anotar un total de 6 puntos (3-7 en tiros de campo) y capturar 2 rebotes. Sin duda no fue una gran actuación para el número uno del draft, teniendo en cuenta las exhibiciones a las que nos tiene acostumbrados.
Pero en el bando de los Lobos hubo varios jugadores que si secundaron a la perfección a Wiggins, poniendo su importante granito de arena para que los fans de los Lobos viesen por fin un triunfo en casa.
Zach LaVine se marchó del partido con 12 puntos (4-12 en tiros de campo) en su haber, además de haber capturado 5 rebotes. Igual anotación logró Gorgui Dieng (4-5 en tiros de campo), que también igualó a LaVine en rebotes capturados, mientras que Kevin Martin logró 11 puntos (4-11 en tiros de campo) para su cuenta particular, siendo ellos tres los únicos que tuvieron dobles dígitos en anotación por el bando local (además de Andrew Wiggins).
Igualmente notables fueron las aportaciones de Ricky Rubio con 8 puntos (2-5 en tiros de campo y 4-4 en tiros libres), a los que añadió 6 rebotes y 11 asistencias, por lo que se quedó de nuevo cerca de un doble-doble, o quizás algo más. Algo parecido a Kevin Garnett que sumó 8 puntos (4-5 en tiros de campo) y 10 rebotes (todos ellos defensivos).
Finalmente Shabazz Muhammad con 7 puntos (3-7 en tiros de campo) y Adreian Payne con 4 puntos (2-3 en tiros de campo), completaron la lista de anotadores de Minnesota en esta importante victoria.
Ahora toca recibir a Atlanta y tratar de lograr seguir con la buena senda de resultados, con el fin de equilibrar aún más el balance de victorias y derrotas y seguir acercándose a los puestos de playoffs. La cita será el próximo miércoles, víspera del día de acción de gracias, con el Target Center como testigo.
Hasta pronto desde España.