featured-image

Los Lobos afrontan diciembre con optimismo

Por Miguel Ángel Martín

Columnista de Timberwolves.com

Minnesota ha terminado el mes de noviembre con un gran balance de victorias, que le han acercado mucho a los puestos de playoffs. Haber terminado con ocho victorias y nueve derrotas, ha llenado de optimismo a una plantilla que afronta cargada de motivación esta temporada.

La pérdida de Flip Saunders fue un duro golpe para todos, a pocos días de afrontar la competición, pero el mejor homenaje que los Lobos podrían hacerle, era jugar un gran baloncesto y devolver a Minnesota a los puestos que se merece.

No hay que olvidar que el propio Flip Saunders guió a los Timberwolves en sus mejores años, la pasada década. Pero de eso hace ya demasiado tiempo, y con las jóvenes figuras con las que cuentas los Lobos en la actualidad, una nueva era se avecina. Precisamente, dar el salto de calidad era una premisa para esta temporada y de momento el equipo está confirmándolo.

A pesar de los buenos resultados, en líneas generales, hay que resaltar lo extraordinario de cómo se ha producido el balance. De los ocho triunfos logrados, tan solo dos se han logrado en casa, mientras que el resto se ha logrado lejos del Target Center, con tan solo tres derrotas a domicilio. Así pues Minnesota acumula el curioso balance de 2-6 en los partidos disputados en Minneapolis y de 6-3 en los encuentros disputados como visitante.

Al margen de que todos esperamos que los Lobos obtengan mejores resultados en casa, en meses venideros, también hay que destacar importantes detalles que se han producido en el mes de noviembre, y que han influido en el devenir de la temporada.

Uno de los que más ha podido influir y que será un tema importante en lo que resta de temporada es el estado de salud de Ricky Rubio y que está aquejado del tobillo que le impidió jugar más de 22 partidos el año pasado.

Sin su presencia, los Lobos tan solo han podido ganar un solo partido y fue en Sacramento, poco antes de terminar el mes, de ahí la importancia de Rubio para el equipo, por mucho que Zach LaVine esté haciendo una gran campaña. Las aspiraciones de playoffs de los Lobos pasan precisamente porque ambos puedan aportar calidad al equipo al mismo tiempo y no siendo LaVine sustituto de Rubio.

Otro factor importante para la temporada de los Lobos está siendo la gran actuación de Wiggins este año. El que fuese novato del año la pasada campaña, promedia en la 2015-16 una media de 21.8 puntos por partido y ha acumulado 10 partidos en los que ha anotado más de veinte puntos en cada uno de esos encuentros, siendo su mejor marca de 33 puntos, logrados ante Atlanta, en el partido disputado en Georgia.

De este modo está confirmando su salto de calidad necesario para liderar a los Lobos a cotas importantes y para consolidarse como una de las futuras grandes estrellas de la liga en el futuro (y esperemos que ese futuro sea próximo).

La otra gran figura que ha destacado en el entorno de los Lobos en este primer mes de competición, ha sido Karl-Anthony Towns.

Ha terminado el primer tramo de la competición con una media de 14.4 puntos por partido, además de acumular 9.4 rebotes y 2.2 tapones por partido. Además ha logrado ocho dobles-dobles en lo que llevamos de temporada y en otros dos partidos se quedó a un solo rebote de lograr sumar otro doble-doble más, por lo que de momento se está confirmando como todo un gran jugador, digno de su posición en el draft del año pasado y como una figura en ciernes, que puede consolidar las opciones de futuro del equipo.

De este modo, Minnesota afronta el mes de diciembre estando novenos de Oeste, con las mismas victorias y derrotas que los Suns, que son octavos, a una victoria de los Clippers que son sextos del Oeste y a medio triunfo de los Jazz que son séptimos en la Conferencia.

Y es que la clasificación a estas alturas está muy apretada, ya que con siete triunfos, quedan por detrás de Minnesota los Blazers, los Rockets y los Kings.

Ahora comienza diciembre con cuatro partidos en el Target Center que serán fundamentales para consolidar al equipo en el buen camino y reconciliarse con la afición, por haber ganado tan solo dos partidos en casa, en el mes que ya nos ha abandonado. Magic, Blazers, Clippers y Lakers, serán los primeros rivales de los Timberwolves en casa, antes de viajar a Denver y a Phoenix para jugar los primeros partidos lejos de casa en diciembre.

Un calendario importante para confirmar que los Lobos pueden vivir este año una gran temporada.

Hasta pronto desde España.