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Caldwell-Pope se asienta y su nivel se dispara

EL SEGUNDO – Kentavious Caldwell-Pope oficialmente está encendido.

El escolta parece haber encontrado su rol en el equipo, y los resultados han sido todo lo que los Lakers esperaban de él…y más.

Su llegada durante el verano generó expectativa por su doble talento a la hora de aportar en defensa y castigar desde larga distancia. Además, ya en su quinta temporada y a los 24 años de edad, él empieza entrar a la parte dulce de la carrera de un basquetbolista, en la que los jugadores usualmente están en la cima de sus talentos.

Sin embargo, su comienzo no fue el más auspicioso. El ex jugador de los Detroit Pistons debió ver los primeros dos partidos de la temporada desde la banca tras cumplir una suspensión por un incidente, y tras su debut, promedió 10.9 puntos, 4.7 rebotes, 2.6 asistencias y 1.4 robos, disparando 40.9 por ciento en tiros de campo y 31.0 en triples.

“Es un jugador nuevo en un equipo nuevo”, explicó Luke Walton. “Puedes ver en la historia de la liga, siempre que juntas a un nuevo grupo de muchachos, nunca funciona de inmediato. El baloncesto es un juego de timing…en este nivel debes saber dónde pasársela a la gente. Algunos les gusta atraparla abajo, otros al lado izquierdo, al lado derecho – son todas cosas que aprendes como compañeros y jugando juntos. Tenemos un grupo nuevo de jugadores y KCP es obviamente un jugador de baloncesto talentoso. Toma tiempo, toma familiaridad para realmente llegar a tu potencial y tu nivel máximo, y todavía no estamos cerca de eso”.

Por lo pronto, las cosas van en la dirección correcta. Con el equipo aún encontrando su mejor nivel en ofensiva, las mejoras de KCP han sido un gran paso adelante.

KCP Last 10

En los últimos 10 partidos el producto de la Universidad de Georgia promedia 14.3 puntos, 5.4 rebotes, 2.8 asistencias y 1.8 robos por partido. Sus porcentajes subieron a 43.4 por ciento en tiros de cancha y 36.9 en triples. En la totalidad de lo que va de la temporada, Caldwell-Pope tiene los mejores números de su carrera en todas las estadísticas menos puntos y porcentaje de tiros libres.

“Siento que se está asentando, tomando tiros con los que está cómodo”, opinó Jordan Clarkson.

Caldwell-Pope ha mejorado en ambos lados de la cancha en ese lapso. Él pasó de tener eficiencia ofensiva de 97.9 a 100.0 en sus últimos 10 juegos, y bajó su eficiencia defensiva de 102.8 puntos permitidos por cada 100 posesiones a 100.1.

Su confianza también parece ir en ascenso, reflejada no solo en su puntería en triples en los últimos tres juegos (11/22), sino también en su rendimiento en momentos importantes. Este tiro en suspensión para enterrar a los Bulls, en pleno contragolpe, es el ejemplo perfecto:

Su presencia ha sido clave para la que ha sido la gran historia de los Lakers esta temporada: la defensa. Los laguneros cuentan con la sexta mejor defensa de la NBA, permitiendo 101.0 puntos por cada 100 posesiones, según NBA.com/Stats.

“Es duro, persigue la pelota”, señaló Walton. “Es bueno en conseguir robos y en mantener a los rivales lejos del medio de la pintura. Cuando se empareja con un interno es capaz de darles pelea y le gusta ese reto. Desde un punto de vista de mentalidad, él realmente ayudó a cambiar nuestra identidad en cuanto a cómo competimos en defensa”.

Clarkson alabó su intensidad, que es la que marca la pauta en el canasto propio.

“Él va, ataca a los rivales y le da energía en ese lado (de la cancha) a la primera unidad”, dijo.

KCP también ha mostrado sorprendentes dotes creativos, particularmente cuando comparte la cancha con Clarkson. El producto de Missouri habló de la química que han desarrollado en un puñado de semanas.

“Cuando jugamos juntos nos hace el juego más fácil”, reconoció. “Yo lo encuentro a él y él me encuentra a mí…él sabe por qué estoy ahí. Yo estoy ahí para anotar, y él me encuentra. Él sabe que si llego a la pintura se la voy a pasar a él. Tratamos de impulsar el ritmo cuando estamos en el partido”.

Por si fuera poco, Caldwell-Pope también es señalado a menudo por Walton, su cuerpo técnico y el plantel por su veteranía, compañerismo y buen humor. De sonrisa fácil, KCP se ha ganado rápidamente el respeto y cariño de sus colegas.

“Es un gran compañero, uno de los mejores que he tenido seguramente”, apuntó Julius Randle.