Nunca hubo un jugador y una ciudad que fueran tan bien juntos como Shaquille O'Neal y Los Ángeles.
Charlamos con Pepe Mantilla, quien cubrió su carrera en L.A. desde el primer día, y nos contó varias anécdotas acerca de este "gigantón bueno" que dejó una huella imborrable en el corazón de toda la afición de los Lakers.