EL SEGUNDO – La versión que se está viendo de Brandon Ingram en el mes de marzo es la que muchos esperaban la noche que fue elegido No. 2 en el draft del año pasado.
No solo el novato lidera al equipo en minutos de juego, sino que también su producción – en cuanto a cantidad y calidad en términos de porcentajes – se encuentra en franco ascenso, con nueve partidos al hilo anotando en dobles dígitos.
Eso ha ido de la mano con muy buenas actuaciones individuales de jugadores como Ivica Zubac, Jordan Clarkson y D’Angelo Russell, que han logrado sus mejores marcas personales en el mismo lapso de tiempo.
Sin embargo, Luke Walton espera mucho más de los suyos, particularmente del oriundo de Kinston, Carolina del Norte.
El martes por la noche, con el equipo perdiendo por 30 puntos al entretiempo contra los Clippers, el entrenador de los Lakers decidió dejar en la banca al pleno de su quinteto titular, pese a que tanto Zubac como Ingram estaban teniendo actuaciones dignas.
“Brandon fue fantástico”, aclaró Walton tras el ensayo del miércoles. “Le dije en el entretiempo, ‘lo lamento por ti, que tengas que sentarte, porque estás dejando todo’. Si vamos a continuar pregonando que las cosas son en equipo, siendo parte de la primera unidad, es parte de su responsabilidad. Creo que fue muy bueno anoche. Es injusto que le pasó por la manera que está jugando, pero creo que era importante mantener el mensaje que el equipo viene primero, y lo individual segundo”.
Uno de sus compañeros vio lo mismo.
“Obviamente no jugamos duro como grupo”, reconoció Russell. “Algunos muchachos estaban jugando realmente bien – Brandon estaba jugando muy bien, no creo que mereciera eso. Como equipo, como unidad titular, no jugamos bien juntos y eligió a aquellos que jugaron bien juntos”.
Ingram, como ya en un par de ocasiones esta temporada, no pudo ocultar su descontento.
“Se lo vio enojado, pero debería haber estado enojado”, observó Walton. “Creo que entendió, vino (el miércoles) a la práctica y fue fantástico, y fue el primero en todos los ejercicios que hicimos”.
El propio jugador acató el mensaje, y pese a ser directamente damnificado, reconoció que lo hecho en los primeros 24 minutos ante los Clippers no puede volver a pasar.
“(Walton) nos dijo que es inaceptable salir de esa manera y creo que fue vergonzoso para nosotros ir perdiendo de esa forma”, opinó. “Es algo que no puede suceder”.
Walton, sin embargo, ha estado encarando cada partido con dos ópticas: el día a día, y la versión macro. El entrenador ha deslizado durante distintos momentos del año que Ingram tiene mucho trabajo por hacer a la hora de erigirse en líder.
“Es una manera de hacer que Brandon sea más vocal, algo que ha estado haciendo de a poco”, dijo. “Que acepte un rol de liderazgo. Es una manera de decirle, ‘aunque estés jugando bien individualmente, necesitamos más de ti. Necesitamos que eleves a tus compañeros’”.
El reto es válido, sobre todo cuando se trata de moldear a un chico de 19 años con un mundo de potencial a sus pies.
Walton, que lo ve todos los días, sabe de la timidez del alero, pero también ve el tipo de atributos que igual pueden catapultarlo a un lugar de conducción grupal.
“Es más su ética de trabajo que me permite ver que puede ser esa persona”, dijo Walton. “No sé qué tan vocal llegará a ser, pero seguiremos viendo lo que podemos sacar de él”.