LOS ÁNGELES – Tras pasar gran parte de diciembre en aviones y hoteles, los Lakers comenzarán el 2017 de manera mucho más placentera.
De mejor humor tras pasar las vísperas de Navidad y Año Nuevo en casa con la familia, el equipo de Luke Walton disputará la mayoría de sus juegos en STAPLES Center.
En total serán 15 partidos en 31 días, con 10 de ellos en Los Ángeles y cinco en la carretera.
Por si fuera poco, las ciudades que visitarán son todas en la Conferencia Oeste, y el viaje a Dallas será el más alejado del sur de California.
Será entonces un mes para recargar las baterías, comer comida casera y sumar algunos valiosos triunfos.
LLEGAN LOS MUCHACHOS DE RILEY
Uno de los partidos más apasionantes del mes será el 6 de enero contra Miami Heat, un equipo al que ya habrán enfrentado en South Beach pero que tendrá una fisonomía diferente, ya sin Dwyane Wade pero con mayor protagonismo para Goran Dragic y Hassan Whiteside.
Luol Deng enfrentará a sus ex compañeros por segunda vez en la temporada, y los aficionados en STAPLES Center esperarán poder ver en cancha a Chris Bosh (al que desde Lakers.com le deseamos una pronta y exitosa recuperación), y algunos de sus nuevos valores como Tyler Johnson, Josh Richardson y Justise Winslow.
Para esa altura los Lakers seguramente también tendrán una rotación más definida, y la idea de Walton podría verse de forma más clara.
TEMIDO DOBLETE PORTLAND-UTAH
La cantidad de partidos en casa no significa que los rivales sean accesibles. Los Lakers recibirán a Memphis Grizzlies y Toronto Raptors, además de planteles renovados como los de Indiana Pacers, Orlando Magic y Detroit Pistons.
También enfrentarán a dos claros candidatos al título como Spurs y Clippers.
Sin embargo, el doblete Portland-Utah, ambos de visitante y en noches consecutivas, se vislumbra como uno de los más complicados. Ambas ciudades le han dado problemas a los Lakers en el pasado, y por si fuera poco, ambos equipos vienen en ascenso.
Las llegadas de Evan Turner/Festus Ezeli (Portland) y George Hill/Boris Diaw/Joe Johnson (Utah) los convierten en equipos mucho más peligrosos, y los jóvenes Lakers deberán estar atentos ante dos rivales que tienen como objetivo la postemporada.