LOS ÁNGELES – Los Lakers sumaron su novena derrota de la temporada tras encajar un categórico 136-115 ante los Golden State Warriors.
El equipo dirigido por Steve Kerr tiene todos los ingredientes para ser la gran pesadilla de los angelinos, y sus virtudes volvieron a dejar en evidencia las miserias de los Lakers, que además tuvieron nuevamente muchos lapsos defensivos.
A la hora del análisis se deben tener en cuenta ambos componentes: las falencias defensivas de los pupilos de Byron Scott (entre las que se encuentra un nivel de esfuerzo irregular) y las virtudes de los visitantes, que combinan una ofensiva poderosa con una defensa ordenada y astuta. Esa mezcla resultó ser demasiado para estos Lakers en formación.
Scott se fue particularmente frustrado porque, para él, el esfuerzo en transición estuvo ausente desde la primera jugada.
“Bandeja…en transición”, apuntó el entrenador. “Mirándola en el entretiempo, y hablándoles sobre eso, para mí fue falta de esfuerzo. Es volver en transición. Nuestros muchachos estaban trotando y se los mostré en el entretiempo y no estaba muy feliz al respecto. No podemos ganar de esa manera”.
Kobe Bryant hizo una lectura muy similar.
“Debemos volver en transición y darnos la oportunidad de jugar defensa de media cancha”, aseguró. “Es esfuerzo y velocidad”.
Scott siguió haciendo hincapié en la actitud.
“Para mí el esfuerzo son tres cosas: quieres hacerlo, puedes hacerlo o no quieres hacerlo”, dijo. “Es simple. Si los veo trotando voy a asumir que están cansados, y si asumo eso, entonces tengo que hacer cambios”.
El estratega apuntó la crítica hacia los internos, aunque evitó hacer nombres propios.
“Por lo que vi esta noche fueron más los internos”, dijo. “Esta noche el énfasis contra este equipo era regresar y regresar rápido. No intentar manotear la bola, no hablar con los referís, teníamos que regresar”.
Carlos Boozer tuvo una opinión diferente.
“No creo que hayan sido solo los internos, creo que fueron todos”, señaló. “A veces nos cuesta ayudar a los perimetrales, pero cuando lo hicimos nuestra defensa del lado débil no estuvo. Eso no es solo los internos, sino el trabajo de todos. También tengo que debemos aceptar el reto de marcar a Steph Curry, a Klay Thompson y hacer un mejor trabajo en ayudar, pero tampoco podemos siempre depender de la ayuda, debemos hacer nuestro trabajo. Es el trabajo de todos”.
Scott recalcó que si sus jugadores siguen sin captar sus principios defensivos, deberá recurrir a otros métodos.
“Estoy cerca”, confesó. “La paciencia se está acabando y no tiene nada que ver con la ejecución en ese lado de la cancha. Solo puedes ejecutar si lo estás haciendo con ganas. Si juegas duro, y le das esa energía y ese esfuerzo cada vez. Lo puedo arreglar, y lo haré a partir del martes”.
Precisamente el martes, ante Atlanta Hawks, comenzará una mini gira de carretera que incluirá tres partidos en cuatro días, todos ante rivales que clasificaron a playoffs la última temporada.
Los Lakers permitieron 26 puntos en transición, y el total en la pintura fue de 54, un tema recurrente en cada una de las derrotas. Además, los Warriors dispararon 14-28 en triples.
“Tengo más paciencia que nadie, pero no puedo sentarme y ver jugadores que no están jugando duro”, concluyó Scott. “Nadie se va a sentir mal por nosotros”.