Los Sixers han acabado el mes de enero con mal sabor de boca, caer de un modo sorpresivo con los Magic de Orlando. Pero lo cierto es que el equipo de Doc Rivers ha logrado en este comienzo de año, enlazar una serie de triunfos que han dejado a los Sixers muy cerca de la cima del Este y con balance de triunfos de 32-17, que hacen soñar a la fanaticada de la ciudad del Amor Fraternal.
No en vano hemos ido enlazando rachas de triunfos que dejan a Philadelphia a apenas tres triunfos de Boston, que de momento es líder del Este de la NBA.
Victorias ante los Pelicans, los Pacers y los Pistons por partida doble, fueron la antesala de una racha de siete triunfos consecutivos, que dieron a los Sixers una nota muy alta en el Este de la NBA. Sobre todo, con la gira de triunfos por el Oeste de la NBA, con victorias sobre la bocina ante los Jazz en Salt Lake CIty y ante Los Angeles Lakers en el Sur de California, que dieron paso a tres triunfos más ante los Clippers, los Blazers y los Kings, todas ellas lejos de casa.
Eso mostró el tremendo potencial del equipo de cara a aspirar a grandes gestas este año, que apenas empieza. Pero quizás fueron los dos siguienets triunfos los que más satisfacciones dieron, al ser frente a grandes rivales y además en casa.
Ante los los Nets se logró un triunfo ajustado (137-133), pero con una increible actuación grupal, en donde podremos destacar al trío de estrellas de Philadelphia, pero en donde se sumaron a la fiesta varios jugadores más, con dobles dígitos en anotación, para el equipo de Doc Rirers.
Curiosamente, el máximo anotador del equipo salió desde el banquillo, pero si decimos que su nombre es Tyrese Maxey, ya no nos extraña tanto. Estuvo treinta minutos en pista, para sumar 27 puntos en su haber, gracias a un excelente 8-14 en tiros de campo, siendo en triples el promedio de 6-9, además de sumar 5 asistencias, que le dejaron como uno de los más destacados del choque.
Pero quizás donde un placer un poco más especial, fue el duelo de gigantes entre los Sixers y los Nuggets, que marcó la séptima victoria consecutiva (126-119), que liderados por Nikola Jokic, llegaban a la ciudad del Amor Fraternal, con la intención de poner las cosas muy dificiles a uno de los grandes del Este.
Lograron por bastantes minutos poner las cosas muy complicadas para Philly, pero en la segunda mitad, el equipo se activó, tomo las riendas del encuentro y logró un merecido y meritorio triunfo, que además viene a confirmar no solo el buen momento del equipo, sino también de Joel Embiid.
El center africano se llevó el duelo de gigantes de la NBA, con Nikola Jokic como compañero de baile en el parquet del Sur de Philadelphia. El serbio no defraudó en la cita, anotación 24 puntos, de uno 8-12 en tiros libres, 2-2 en triples y 6-6 en triples, además de contribuir a su equipo con 8 rebotes y 9 asistencias.
Número de gigante de la NBA, que no superaron a los números de la gran estrella de los Sixers. al igual que Jokic fue el máximo anotador de su equipo, Embiid lo fue del nuestro, acabando el choque con unos sensacionales 47 puntos, en un 18-31 en trios libres, 4-7 en triples y 7-10 en tiros libres, ayudando a su equipo además de con los puntos, con 18 rebotes, 5 asistencias, 3 robos de balón y 2 tapones, que pusieron la guinda a una sensacional actuacion.
Estos números ayudaron a remontar una situación que no fue demasiado positiva en los primeros compases del choque ante Denver. El parcial en los dos primeros periodos, fue sensiblemente superior para el equipo visitante, logrando sacar nueve puntos de ventanja en el primer cuarto (29-38) y otros seis puntos más en el segundo periodo (29-35).
Pero el segundo tiempo fue totalmente distinto, con parciales mucho más favorables a Philadelphia, dejando el marcador muy ajustado para los últimos doce minutos de partido, tras acabar el tercer cuarto con un parcial favorable de 38-26.
Un arreón final de los Sixers, terminó de dejar sentenciado el encuentro por siete puntos (126-119), lo que confirma la candidatura de los Sixers a acabar en los primeros puestos del Este (aspirando a estar en lo más alto).
Todo ello gracias a Embiid, pero también a actuaciones no menos magistrales de James Harden, por ejemplo. La otra gran estrella de Philadelphia, logró acabar el encuentro con 17 puntos, en un 5-10 en tiros de campo, además de un 3-6 en triples, a los que sumó 13 asistencias del todo decisivas.
Y aunque el final de este mes de enero ha llegado con una derrota ante los Magic, no se puede empañar la gran actuación de este equipo en enero. Y ahora llega febrero, mes de cambios de jugadores, reforzando a aspirantes al anillo, el mes del all-star y casi el último mes, antes de la vorágine de marzo y abril con el cierre de la temporada regular, tratando de buscar sitio en la rampa de salida para la postemporada.
Llegan momentos interesantes y los Sixers están listos.
Hasta pronto desde España.