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La explosión ofensiva de KCP no alcanzó en revés ante los Bucks

Ni las ausencias ni el mejor Kentavious Caldwell-Pope fueron capaces de frenar el paso de estos excelentes Milwaukee Bucks.

Los Lakers batallaron hasta el final el martes por la noche, superando el cansancio de una larga gira de carretera, y ofrecieron una actuación digna, pero cayeron por 115-101 ante el que es, hoy por hoy, el mejor equipo de a NBA.

La tropa de Luke Walton se apoyó en una impresionante labor ofensiva de Kentavious Caldwell-Pope, quien anotó 35 puntos tras encestar ocho de sus 14 intentos desde larga distancia.

El escolta disparó 18/43 en triples en los cinco partidos en la ruta para un gran 41.9 por ciento. Vale recordar que KCP llegaba al partido promediando 27.5 por ciento desde más allá del arco tras el receso por el Juego de Estrellas.

Y “Kenny”, como lo apodaron sus compañeros, logró contagiar un poco a los suyos – al menos desde larga distancia. Reggie Bullock disparó 3/3, mientras que tanto Kyle Kuzma como Josh Hart aportaron un par cada uno para que los Lakers finalizaran con un sólido 37.2 por ciento en la noche.

El problema fue que, a diferencia de la mayoría de los partidos de la temporada, los laguneros no pudieron lastimar adentro del arco. El 38.4 por ciento en tiros de cancha fue la tercera peor marca de la temporada, y la magra cosecha en la pintura (32 puntos) tuvo mucho que ver con eso.

Claramente, el equipo extrañó a LeBron James y Brandon Ingram en un partido en el que también faltaron Lance Stephenson, Tyson Chandler, y Lonzo Ball. A los Bucks también le faltaron su astro (Giannis Antetokounmpo) y otro titular clave (Malcolm Brogdon), pero el resto de la rotación los suplió sin grandes inconvenientes.

Brook Lopez (cinco triples, 28 puntos) y Khris Middleton (cuatro triples, 30 puntos) marcaron el rumbo de la victoria No. 53 de los locales en la temporada.

Los Lakers, por su parte, vendieron cara la derrota. Un déficit de 23 puntos sobre el final del tercer cuarto hacía presagiar una goleada, pero los laguneros batallaron para ponerse a cinco a 6:52 del final. Eso obligó a Mike Budenholzer a mandar a sus titulares de vuelta a la cancha, y estos se encargaron de que Milwaukee no pasara más sustos.

De esta forma, los angelinos regresan al sur de California con marca de 1-4 en la gira, y habiendo perdido nueve de sus últimos 10 partidos.

El viernes, ante Brooklyn, afrontarán el primero de los 11 partidos que quedan en el calendario – ocho de ellos en los confines de STAPLES Center.