EL SEGUNDO – El regreso al sur de California coincidió con buenas noticias dentro del plantel de los Lakers.
Y es que tras un par de semanas de ausencias, tanto Brandon Ingram como Rajon Rondo podría regresar a la cancha el viernes ante los New Orleans Pelicans.
Ambos jugaron hablaron con la prensa el jueves, y dejaron en claro que su disponibilidad dependerán de cómo reaccionen sus cuerpos tras la sesión matutina.
“Se siente bien”, dijo el base sobre su mano derecha operada. “Es tomarlo un día a la vez y ver como reacciona cuando me levante por la mañana”.
El veterano opinó que el equipo sintió la fatiga en los últimos dos juegos de la gira de carretera, y que anticipa que tras la práctica del jueves podrán corregir los errores cometidos.
Además, Rondo dijo que intentará devolverle al conjunto algo de la velocidad perdida, pero que eso tardará cierto tiempo.
“Puedes simular cosas pero no hay nada como estar en la cancha”, avisó.
Más allá de eso, Rondo dijo que no tendría limitaciones.
“El rango de movimiento está, y ya no está inflamada, pero dependerá del contacto o cuando caiga al piso, algo que no ha sucedido todavía”, apuntó. “Veré cómo reacciona en la mañana y veremos”.
Por su parte, Ingram contó que se mantuvo en contacto con Luke Walton durante la gira, y que le sirvió mucho poder compartir el proceso de rehabilitación con Rondo – pudiendo emular de esa forma la ética de trabajo de uno de los grandes mentores de la liga.
El alero reconoció estar ‘cansado’ de estar afuera, pero dijo que lo aprovechó para seguir creciendo.
“Siempre que estoy lejos del equipo tengo la chance de observar y ver qué puedo traer, y ver dónde puedo ayudar”, explicó. “Ver dónde puedo ser eficiente, dónde puedo encontrar mis tiros, y dónde puedo ser realmente bueno en el lado defensivo”.
Ingram se mostró confiado de poder ponerle fin a su ausencia.
“Mi meta es jugar”, sentenció.
Por último, JaVale McGee continúa recuperándose de sus síntomas gripales y no estuvo presente el jueves. Walton contó que el pivot continúa con medicación y suero.
“Es una de esas cosas que entre los doctores y él, y cuando se sienta bien, volverá a jugar”, apuntó.
El entrenador reconoció el efecto que tuvo la ausencia del ex Warriors. Los Lakers permitieron 66 puntos en la pintura ante los Wizards, y 52 ante los Nets – ambas derrotas.
“Es frustrante perder, y es frustrante permitir muchos puntos en el aro”, reconoció Walton. “Es uno de nuestros énfasis, y por eso trajimos a JaVale. Ha hecho un gran trabajo para nosotros”.
Walton agregó que el equipo no logró hacer ajustes lo suficientemente rápido ante las bajas, y que eso contribuyó a los malos resultados.
Uno de esos ajustes fue el uso más prolongado de alineaciones bajas, algo que el cuerpo técnico probó un poco por necesidad a corto plazo, y otro poco para ir afilándolo como un arma a futuro.
“Estamos muy al tanto de que a medida que continuemos en esta temporada y tratemos de llegar adonde queremos llegar, habrá equipos contra los que deberemos jugar con (alineaciones bajas). Así está compuesta la liga ahora con algunos de los equipos de elite”.