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Lakes sufrieron de anemia ofensiva en derrota ante Kings

LOS ÁNGELES – Historia de oportunidades perdidas.

Eso resume el triunfo que se le escapó a los Lakers el domingo por la noche al enfrentarse en casa ante los Kings.

En un partido que tuvo 17 cambios de liderato y 14 empates, los laguneros acabaron cayendo por un punto pese a una muy buena labor en el costado defensivo – dejando a Sacramento en 84 puntos y un 38.0 por ciento en tiros de cancha.

La diferencia fue mínima y las oportunidades fueron máximas, algo que Luke Walton destacó como el factor más frustrante.

“Tuvimos nuestras chances, y eso es lo que siempre pregonamos de la defensa, que incluso cuando nada te sale bien ofensivamente, igual tienes la chance de ganar el juego si juegas buena defensa”, opinó el estratega.

Los Lakers tuvieron apenas cuatro canastas pero también fallaron cinco tiros libres en el periodo final, un pasaje en el que la ofensiva desapareció por completo. Apenas Julius Randle, con constantes embates hacia el canasto, logró mantenerlos a flote, anotando 11 de sus 19 puntos el cuarto.

El ala-pivot, con problemas de faltas, disputó apenas 24 minutos.

“No hicimos jugadas”, agregó Walton. “Jugamos duro defensivamente pero ofensivamente les permitimos muchos puntos de segunda jugada en la primera mitad, y en la segunda mitad no cuidamos la bola. Tuvimos cuatro pérdidas en la primera mitad y terminamos con 15, así que fueron 11 en la segunda mitad, incluyendo creo seis en el cuarto periodo”.

La anemia ofensiva fue un reflejo de las ausencias de Lonzo Ball y Brandon Ingram, los dos principales generadores de juego de la plantilla.

Y con Kyle Kuzma (13 puntos en 5/16 de cancha) y Kentavious Caldwell-Pope (16 puntos pero con 0/6 en triples) apagados, los Lakers simplemente no lograron generar suficientes puntos como para obtener la victoria No. 33 de la campaña.

Walton se mostró frustrado, y le envió un recado claro a sus dirigidos, en las vísperas de enfrentar a Utah (dos veces), San Antonio, Minnesota, Houston y los Clippers antes del final de la temporada.

“Deberemos jugar mucho mejor el resto de la temporada”, avisó. “Van a venir muy buenos equipos que están jugando por algo bastante significativo, así que deberemos elevar nuestro juego bastante o sino van a ser unos seis juegos muy largos para cerrar la temporada”.